La piña es una delicia que viene directo de las zonas tropicales y que tiene muchos beneficios para la salud. Desde la antigüedad esta jugosa fruta se utiliza como antiinflamatorio, ya que posee la enzima bromelina que ayuda a reducir la inflamación.
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En especial, la piña colabora en los tratamientos paliativos de la artritis, las lesiones musculares y enfermedades inflamatorias del intestino, como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. También reduce la hinchazón y las inflamaciones derivadas de lesiones como distensiones, tendinitis y esguinces, entre otras.
Además, esta fruta es utilizada como diurético, principalmente su cáscara. Es rica en vitaminas A, C, K, B6, B9 (ácido fólico), aporta en fibra y tiene bajo contenido de carbohidratos y calorías.
Prueba estas recetas
Jugo de piña para combatir la retención de líquidos
Ingredientes:
– Cáscaras de piña
– 1 litro y medio de agua purificada
– 1 ramita de canela (opcional)
Preparación: Lavar y cortar las cáscaras de piña. Ponerlas en una cacerola a fuego alto con el agua y canela (opcional). Hervir por al menos 20 minutos y luego dejar reposar. Conservar en el refrigerador y tomar en ayunas.
Batido para bajar la inflamación de articulaciones
Ingredientes:
– 1 piña
– 1 litro de agua purificada
– 1 trozo de cúrcuma o 1 trozo de jengibre
– Miel
Preparación: Pelar la piña, sacar el centro y cortar en trozos. En la juguera agregar todos los ingredientes y procesar. Conservar en el refrigerador y tomar 3 veces al día.
