Esta receta con betarraga te dará mucha energía. Es un fermentado que beneficiará tu salud digestiva
Sobre el Kvass:
– 1 taza y media de betarragas peladas
– Salmuera: 800 ml agua filtrada con 3 cdas de sal marina diluida
– Dos dientes de ajo
– Un trozo de cebolla morada (max 2 cdas)
Procedimiento:
– Frasco de 1 lt limpio y seco
– Cortar 1 taza y media de betarragas en cuadros.
– Agregar la salmuera, el ajo y las cebollas.
– Dejar por 5-7 días tapado con su tapa, revolver dos veces al día.
– Luego colar y cambiar al refrigerador.
Beber frío. comenzar con de a poco, beber 50 ml al día, en el desayuno o bien entre comidas
La betarraga es originaria de Europa, Asia y el norte de África. Se trata de un alimento prehistórico, pero en aquella época sólo se consumían sus hojas. Fue recién en el siglo XIX cuando se comenzó a aprovechar la planta completa, ya que su dulzura la hizo ser fuente de azúcar.
Las hojas de betarraga pueden ser consumidas en forma ilimitada, sin embargo la raíz es un vegetal con alto contenido de azúcar, por lo que su ingesta debe ser moderada.
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Si incluimos las betarragas a nuestra dieta podemos tener beneficios como reducir la presión arterial, ya que el óxido nítrico que posee nos ayuda a dilatar los vasos sanguíneos; es antiinflamatorio, debido a que es fuente de un nutriente llamado betaína que protege a nuestras células y enzimas del estrés ambiental y además de proteger los órganos internos, colabora a combatir la inflamación. También es rica en fibra y vitamina C y tiene minerales esenciales como el potasio y el magnesio, entre otros.
Todas estas propiedades, hacen que la betarraga sea un alimento esencial para combatir la anemia, entregar energía y limpiar el hígado, ya que ayuda a este órgano en su función depurativa. Asimismo, es un mineralizante del organismo, previene enfermedades al corazón y es fuente importante de ácido fólico, lo que nos sirve para la buena salud de la piel y el cabello.
Las betarragas se puede consumir como ensalada: ralladas crudas, cocidas al vapor o sancochadas con jugo de limón y aderezos; en batidos con otros vegetales o en preparaciones como sopas o cremas.
No olvidar las hojas de las betarragas, que son fuente importante de nutrientes, entre los que cuentan las vitaminas C y A y minerales como el calcio, cobre, manganeso, zinc y hierro. Estas se pueden consumir crudas en batidos o ensaladas o saltearlas con otras verduras.
